En física, se denomina plasma al cuarto estado de agregación de la materia, un estado fluido similar al estado gaseoso, aunque realmente este cuarto estado estaría entre el líquido y el gaseoso, pero en el que, determinada proporción de sus partículas están cargadas eléctricamente y no poseen el equilibrio electromagnético.

En este estado, los electrones se separan de los átomos para formar un gas ionizado. en el que sus iones se encuentran en estado libre, por tanto, es altamente inestable. Estos gases ionizados contenidos en el aire ambiental, en contacto con una superficie con la diferencia de potencial electromagnético adecuado provocan un pequeño arco eléctrico preciso que no transfiere calor a las zonas circundantes.

Es un dispositivo médico que utilizando la diferencia de carga electromagnética entre la punta del manípulo y la piel del paciente, se produce un rayo de micro-plasma PRE-ESTABLECIDO en frecuencia y potencia como resultado de la ionización / excitación de los átomos del gas presente entre la punta del instrumento y el cuerpo. La interacción tisular unida al impacto de este último sobre el tejido, induce una remoción superficial del estrato de corneocitos sublimándolos, (sublimación – pasaje del estado sólido al gaseoso) produciendo un humo visible cuando formando una costra muy pequeña (puntiforme) en la zona tratada, y una bioestimulación del derma a producir nuevas fibras de colágeno (calor selectivo absorbido)

Cuando se aplica sobre la piel, altera la estructura de la piel, produciendo

 unas quemaduras puntiformes, pequeñas similares a las producidas por un láser de CO2, de Erbio o Q-switch.

Mientras un láser CO2 penetra en la dermis para quemar en profundidad, el PLASMA LASER actúa sólo en la piel superficial,  mediante  micro-quemaduras no ablativas controladas y sin producir sangrado, ya que actúa sólo en la epidermis, permitiendo actuar sobre la zona a tratar, produciendo una retracción del tejido y de carbonización o disección según sea el caso y el campo de aplicación, dejando en la piel una ligera costra e inflamación que desaparece en un periodo entre 5 a 7 días, siendo visibles los resultados finales aproximadamente en un mes, tiempo que tarda la piel en regenerarse sin dañar capas más profundas, evitando así la formación de cicatrices.   

Pero a diferencia de estos, el LASER PLASMA es menos agresivo y por ende más conservador, con una recuperación 3 veces más rápida. EL láser de plasma, estimula la formación de nuevo colágeno, nuevas fibras de elastina y estimula la retracción de la piel, mejorando la piel dañada, reduciendo las arrugas, alisando la superficie de piel y mejorando la flacidez.